Con la llegada del verano, los días son más largos y el curso escolar llega a su fin. Durante los meses de verano es más complicado conciliar la vida laboral con la vida familiar. Quizá te preguntas qué se puede hacer con los niños tanto tiempo en casa para tenerlos entretenidos. No es fácil pensar en juegos y actividades que a ellos les puedan gustar y les ayuden en su aprendizaje.
A través de Facebook, algunas madres me han preguntado información sobre distracciones para el verano, de modo que he pensado escribir una serie de post sobre juegos educativos que te pueden venir bien. Serán 4 entradas, no más, que se publicarán en las próximas 2 semanas. En alguno de los juegos será necesario la fabricación de tu propio material mediante sencillas manualidades con objetos de uso cotidiano, que se pueden encontrar en cualquier hogar.
En esta primera entrada voy a hablar del juego: La Cesta del Tesoro. Una cesta o caja que contiene un conjunto de objetos de incierta utilidad y sin conexión entre ellos, que servirán para potenciar, entre otros aspectos, la creatividad de tus hijos.
Si deseas saber más sobre la Metodología Montessori, que se está consolidando cada vez más como alternativa al aprendizaje y la educación clásica, te recomiendo Montessori 360º.
En que consiste la Cesta del Tesoro
Este juego consiste en presentar al niño una cesta con diferentes objetos de dudosa utilidad. El propósito es que el niño pueda explorar, investigar y pensar en la función que puede llegar a tener cada objeto.
La cesta del tesoro es una actividad que incluye la metodología Montessori y que se recomienda a partir de que el bebé pueda permanecer sentado sin apoyos (entorno a los 7 meses). En esta primera etapa del desarrollo evolutivo del niño, el propósito de la actividad es: la exploración de objetos. En etapas posteriores, cuando los niños rondan los 2 años en adelante, se pueden hacer adaptaciones tanto de los objetos que se incluyen en la cesta, como de las consignas del juego, para que les siga resultando entretenido a los menores.
¿Qué se trabaja con este juego?
Con la Cesta del Tesoro los niños trabajaran varios aspectos importantes para su desarrollo sensorial y cognitivo:
- Exploración e investigación de objetos: texturas, formas, colores, sonidos y usos.
- Motricidad fina: coger y soltar objetos de distintos tamaños, e introducir unos objetos dentro de otros, ayuda a los más pequeños a desarrollar su precisión con las manos. Esto será muy útil para cuando comiencen a escribir.
- Coordinación ojo-mano: como en el caso anterior esta habilidad es esencial para la escritura y para la lectura. Poder manipular diferentes materiales favorece la coordinación de su capacidad visual con su capacidad motora.
- Concentración: descubrir y examinar los objetos de la cesta es una tarea que los absorbe. Seguramente pasaran grandes períodos de tiempo investigando y descubriendo nuevos usos para todo lo que allí se pueden encontrar.
- Toma de decisiones: desde los bebés más pequeños donde tomarán decisiones sobre qué objetos prefieren, hasta los niños más mayores de 3 años en adelante que decidirán qué nueva utilidad le darán con todo lo que allí se encuentran.
Cómo construir una Cesta del Tesoro
Esta es la etapa de confección del juguete y aunque en otras ocasiones te he recomendado que realices la construcción de los materiales con tu hijo, en este caso te diré que no. ¿Por qué? porque es la mejor forma de crear un momento mágico a la hora de enseñarle la cesta y de explicarle como jugar por primera vez. No sabe que objetos contendrá la cesta y no ha tenido tiempo de pensar nada sobre ellos.
¿Necesitas controlar tus enfados?

Materiales que necesitas:
- Una cesta o caja, lo que te resulte más cómodo de guardar en casa.
La cesta o caja se rellenará con objetos de dudosa utilidad, de diferentes tamaños y diferentes materiales.
Para bebés hasta los 2 años puedes colocar dentro de la cesta:
- Objetos de metal: un colador, una cadena, una tapadera de bote…
- Objetos de madera: un cepillo de uñas, una cuchara de madera, una brocha de afeitar…
- Objetos naturales: una concha de mar, un recorte de corcho, algunos hilos de lana…
- Objetos de tela, piel o goma: una esponja suave de baño, un par de pompones de diferentes tamaños, un saquito de piel bien cerrado con piedras que suenen al agitarlo…
Para niños de entre 2 a 5 años puedes incluir estos objetos:
- Objetos de metal: un colador, algunos tapones de botellas, un silbato…
- Objetos de madera: unas piedras de colores, unas pinzas de la ropa, algún palito de médico…
- Objetos naturales: algunos tubos de papel higiénico, un par de corchos de botellas, algunas nueces…
- Objetos de tela, piel o goma: algunas figuras geométricas de poliespan, algunos fieltros de distintos colores y tamaños, algunos pompones pequeños de diferentes colores…
Los materiales que aquí te indico son un ejemplo, puedes incluirlos todos o solo algunos y también puedes introducir otros que no he nombrado. La clave para saber qué objetos son buenos para la cesta del tesoro es sencilla: todo aquello que no dañe a tu hijo y que no tenga una utilidad clara.
Una vez seleccionados los objetos solo tienes que meterlos en la cesta y… ¡A jugar!
Cómo se juega a la Cesta del Tesoro
La forma de jugar y presentar la cesta del tesoro será diferente en función de la edad del niño.
Desde los 7 meses hasta los 2 años
Presentación: Le enseñas la Cesta del Tesoro como algo mágico que «tiene muchas cosas».
Jugar: Tomando en tus manos algún objeto y mostrándoselo. De esta manera estarás animando al niño para que él también agarre los objetos.
Su instinto le llevará a tocar, estrujar, chupar, agitar… Perfecto!
Tu función será observar que no se haga daño y que todo va bien. Si ves que tu hijo se desmotiva pronto es que necesita más instrucciones. Puedes indicarle que intente construir, por ejemplo, una torre.
Desde los 2 años hasta los 5
En esta etapa de su desarrollo su nivel cognitivo es mayor, lo que le permite poder alcanzar nuevos objetivos.
La presentación de la cesta del tesoro para estos niños sería algo como:
«Vamos a jugar a un juego nuevo, la cesta del tesoro (le vas enseñando cómo es y qué tiene). Hay un montón de cosas distintas, ¿verdad? Pues el juego consiste en que con todos estos objetos puedas construir lo que tú quieras».
Es importante dejar que su imaginación vuele. Que sea el propio niño el que piense qué puede construir. Si ves que se atasca y eso le genera malestar, puedes indicarle algunos ejemplos de lo que puede crear, como una casa o un castillo. Será suficiente para activar su creatividad.
El nivel de concentración que mostrará tu hijo haciendo su construcción será sorprendente. También las decisiones que vaya tomando en torno a cómo usar cada elemento de la cesta.
Hasta aquí la primera entrega de Juegos para niños. En los próximos días publicaré el siguiente juego.
Si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo por redes sociales. Te estaré muy agradecida 🙂